Séptimo delirio

El nombre no me niega
me con-crece,
el adjetivo no es infinito.

así me reconcilio
con el espejo
aunque no termine
nunca
de escribir el poema.

lo otro
se me hace carne
cuando miro,
cuando coso,
cuando edifico,
cuando riego,
incluso cuando deshilvano
y cuando hallo,
por fin,
la trama oculta
en el reflejo.